Impresión artística de una estrella AGB entrelazada en una región joven de formación estelar. Fuente: Mark Garlick
Investigadores de la Universidad de Sheffield y el Imperial College de Londres han detectado una estrella “retirada” con una rama gigante asintótica (AGB) que atraviesa una región de formación de estrellas jóvenes, lo que antes se pensaba que no sucedía.
Los científicos han identificado esta interacción en uno de los lugares donde creen que se deben formar estrellas como nuestro Sol, utilizando el satélite Gaia, una misión de 740 millones de euros para mapear las posiciones de miles de millones de estrellas en nuestra galaxia.
La última publicación de datos de Gaia, Data Release 3, significa que el equipo de investigación puede identificar con precisión las estrellas que se cruzan. Estos intrusos son estrellas que no se formaron en esta región, sino que solo la atraviesan. El equipo había encontrado previamente estrellas jóvenes entrelazadas, pero ahora encontró una estrella evolucionada mucho más antigua, conocida como AGB, que pasaba por la región.
Estudios previos han demostrado que estas estrellas AGB retiradas producen grandes cantidades de los elementos químicos radioactivamente inestables aluminio-26 y hierro-60. El aluminio-26 y el hierro-60 se entregaron a nuestro joven sistema solar durante la era de formación de planetas y se cree que dominaron el calentamiento interno temprano de la Tierra.
Eventualmente, el aluminio-26 y el hierro-60 pueden haber contribuido incluso indirectamente a la tectónica de placas de nuestro planeta, lo que ayuda a mantener la atmósfera de la Tierra respirable. El equipo de investigación calculó cuánto del Aluminio-26 y el Hierro-60 de AGB podría ser capturado por una estrella como nuestro sol mientras formaba sus planetas.
Dr. Richard Parker, profesor de astrofísica en el Departamento de Física y Astronomía de la Universidad de Sheffield y autor principal del estudio publicado en la revista. Cartas de una revista de astrofísicaÉl dijo: “Hasta ahora, los investigadores se han mostrado escépticos de que estas estrellas viejas y evolucionadas puedan encontrarse con estrellas jóvenes que forman planetas, por lo que este descubrimiento revela mucho más sobre la dinámica, las relaciones y los viajes estelares.
“Al mostrar que las estrellas AGB pueden encontrarse con sistemas planetarios jóvenes, hemos demostrado que otras fuentes de aluminio-26 y hierro-60, como los vientos y las supernovas de estrellas muy masivas, pueden no ser necesarias para explicar el origen de estos elementos químicos en nuestro sistema solar”.
La Dra. Christina Schoettler, investigadora de astrofísica en el Departamento de Física del Imperial College de Londres, identificó la estrella AGB en los datos de Gaia DR3. Él dice: “Gaia está revolucionando nuestras ideas sobre cómo se forman las estrellas y luego se mueven a través de la galaxia. El descubrimiento de una vieja estrella evolucionada muy cerca de estrellas jóvenes en formación de planetas es un maravilloso ejemplo del poder del azar en la investigación científica”.
El próximo paso en esta investigación es buscar otras estrellas evolucionadas en regiones de formación de estrellas jóvenes para determinar qué tan comunes son estos intrusos retirados.
Proporcionado por la Universidad de Sheffield