Fuente: Pixabay/CC0 Dominio público
La cantidad de basura espacial no ha dejado de crecer desde que se lanzó el primer satélite en 1957. La Agencia Espacial Europea (ESA) estima que más de 131.000.000 de desechos espaciales inútiles con un diámetro de 1 milímetro a 10 centímetros están actualmente orbitando la Tierra. velocidad promedio de 36,000 kilómetros por hora, que provienen de una variedad de fuentes, como las últimas etapas de cohetes, satélites obsoletos e incluso herramientas perdidas en el espacio por los astronautas.
“Cualquier pieza mayor de 1 centímetro es potencialmente letal en caso de colisión”, afirma el catedrático de la Universidad de Málaga José Luis Torres, quien junto a la profesora Anelí Bongers coordinaron un proyecto de economía espacial que establece, desde un punto de vista cuantitativo, un modelo teórico que determina la tasa de lanzamiento de satélites que es óptima para maximizar los beneficios en función de la cantidad de desechos espaciales.
En particular, utilizando datos de la NASA y la ESA, el modelo desarrollado se basa en simulaciones computacionales que analizan el impacto de las pruebas antisatélite en la cantidad de desechos espaciales y la probabilidad de colisiones con los satélites en funcionamiento: actualmente hay alrededor de 6,000 satélites en el espacio. . orbita.
Así se elaboró el modelo propuesto por estos investigadores de la UMA, que se publicó en una revista científica Economía de la Defensa y la Pazdetermina dinámicamente la cantidad de basura espacial en función del comportamiento óptimo de las empresas que operan en el espacio al determinar las tasas de lanzamiento y el número de satélites.
Según estos expertos, la cantidad de basura espacial afecta negativamente al número de lanzamientos y satélites. “Los cálculos también muestran que las pruebas antisatélite generan más de 102.000 nuevas piezas de este desecho mayores de 1 centímetro, y sus efectos negativos desaparecen al cabo de 1000 años debido a la gran altura a la que se realizan las pruebas” – aseguran.
Falla de mercado
Los científicos de la UMA estudiaron el espacio desde un punto de vista económico porque, aseguran, es un bien común mundial que, como la alta mar, “será sobreexplotado”. Es más, al no existir una regulación explícita salvo un tratado internacional no vinculante de las Naciones Unidas, es un ejemplo de “falla de mercado” porque debido a la falta de derechos de propiedad se tiende a abusar de este recurso y así generar “ externalidades negativas”.
También advierten que a medida que nos volvamos cada vez más dependientes de las empresas que operan en el espacio, especialmente las empresas de tecnología, la cantidad de desechos espaciales seguirá aumentando, al igual que la probabilidad de colisiones.
“Estamos ante un enorme mercado no regulado cuyos problemas no han hecho más que empezar”, señalan los investigadores de la UMA.
Star Wars: Guerra en el espacio
Finalmente, el estudio cuantifica los efectos de una hipotética guerra espacial que simula la destrucción de 250 satélites. Utilizando el modelo propuesto por UMA, se estima que la basura espacial sería levantada en 25.500.000 piezas mayores de 1 centímetro, aumentando así la probabilidad de colisiones y el número de satélites destruidos.
El objetivo es alertar del impacto de la basura espacial en la economía global y los posibles problemas físicos que puede causar en la Tierra, así como el uso humano del espacio, que advierten en base a esta simulación desaparecerá tanto de las actividades comerciales como científicas. si continúa el ritmo actual de generación de desechos espaciales.
Cedido por la Universidad de Málaga